SU AMOR CORRECTIVO
Esta palabra llamó mi atención: “Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dijo el SEÑOR, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis”. Jeremías 29: 11 El contexto de este versículo es en medio de un pueblo que desobedeció al Señor en todas las formas posibles, ellos fueron un pueblo rebelde y lleno de contradicciones, se entregaron a dioses ajenos, practicaron todo tipo de aberraciones en nombre de Dios, no se humillaron ni se arrepintieron de sus malos caminos, entonces el Señor tuvo que disciplinarlos por amor, tuvo que llevarlos cautivos a Babilonia, el Señor los envió al exilio. Sin embargo, en el capítulo anterior de Jeremías 29, leemos de un tal profeta Hananías profetizando bendición, les dijo que todo estaría bien, que frescos que pronto regresarían a Jerusalén, su profecía era falsa, ¿y no es esto lo que oímos en estos tiempos?, gente profetizando que todo estará bien, que declare bendición, que decrete, que reclame su victoria. Me acu